¡MUCHACHOS SE NOS FUE DON SIRO!
FOTO TOMADA EN MONCION EN 1990 ENTREGANDO , MIENTRAS JOSE ARMANDO ENTREGABA UN PRESENTE A DON SIRO QUIEN APADRINO EL ENCUENTRO EN COFRADÍA CON JESUS JUNTO A OTROS |
Si, se marchó, pero nos dejó un dulce sabor, el sabor del Padre, del Hermano, pero sobre todo el sabor del buen amigo.
Nosotros fuimos bendecidos, y hoy damos gracias al señor por haberlo puesto en nuestro caminar como un ángel guardián, pues disfrutamos de su cariño y su apoyo incondicional cuando más lo necesitamos.
Nos unimos al dolor de su familia y la gran tristeza que embarga a toda la Parroquia La ALTAGRACIA de Guananico donde vivimos en familia con él.
Hoy los que formamos parte de La Gran Familia que Canta , donde quiera que estemos, entonaremos esta canción, la que Don siro nos pedía cantar en Cada Semana Juvenil junto a Apolinar Ramos. "La Casa de mi Amigo" en memoria a Nuestro Don Siro:
AUDIOLetras:
La casa de mi amigo
La casa de mi Amigo no era grande;
su casa era pequeña.
En la casa de mi Amigo había alegría,
y flores en la puerta.
A todos ayudaba en sus trabajos;
sus obras eran rectas.
Mi Amigo nunca quiso mal a nadie;
llevaba nuestras penas.
Mi Amigo nunca tuvo nada suyo;
sus cosas eran nuestras.
La hacienda de mi Amigo era la vida;
amor era su hacienda.
Algunos no quisieron a mi Amigo;
le echaron de la tierra.
Su ausencia la lloraron los humildes;
penosa fue su ausencia.
La casa de mi Amigo se hizo grande,
y entraba gente en ella.
En casa de mi Amigo entraron leyes,
y normas y condenas.
La casa se llenó de negociantes,
corrieron las monedas.
La casa de mi Amigo está muy limpia,
pero hace frío en ella.
Ya no canta el canario en la mañana,
ni hay flores en la puerta.
Y han hecho de la casa de mi Amigo
una oscura caverna,
donde nadie se quiere ni se ayuda,
donde no hay ya primavera.
Nos fuimos de la casa de mi Amigo,
en busca de sus huellas.
Y ya estamos viviendo en otra casa:
una casa pequeña,
donde se come el pan y se bebe el vino
sin leyes ni comedias.
Y ya hemos encontrado a nuestro Amigo,
y seguimos sus huellas,
y seguimos sus huellas.
su casa era pequeña.
En la casa de mi Amigo había alegría,
y flores en la puerta.
A todos ayudaba en sus trabajos;
sus obras eran rectas.
Mi Amigo nunca quiso mal a nadie;
llevaba nuestras penas.
Mi Amigo nunca tuvo nada suyo;
sus cosas eran nuestras.
La hacienda de mi Amigo era la vida;
amor era su hacienda.
Algunos no quisieron a mi Amigo;
le echaron de la tierra.
Su ausencia la lloraron los humildes;
penosa fue su ausencia.
La casa de mi Amigo se hizo grande,
y entraba gente en ella.
En casa de mi Amigo entraron leyes,
y normas y condenas.
La casa se llenó de negociantes,
corrieron las monedas.
La casa de mi Amigo está muy limpia,
pero hace frío en ella.
Ya no canta el canario en la mañana,
ni hay flores en la puerta.
Y han hecho de la casa de mi Amigo
una oscura caverna,
donde nadie se quiere ni se ayuda,
donde no hay ya primavera.
Nos fuimos de la casa de mi Amigo,
en busca de sus huellas.
Y ya estamos viviendo en otra casa:
una casa pequeña,
donde se come el pan y se bebe el vino
sin leyes ni comedias.
Y ya hemos encontrado a nuestro Amigo,
y seguimos sus huellas,
y seguimos sus huellas.
Yosi Gomez Se fue un gran ser humano que dios lo acoja en su santo reino descase en paz don siro
ResponderEliminarAnny Polanco Don Siro, lo recuerdo en su tienda tan amable con todos, reflejaba a Jesús en su rostro, siempre lo recordaremos, mi más sentido pesame a Dña María y a sus hijos Fani, Celeste, Andy Luz y demás.
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